Es imposible saberlo con certeza. No es raro que los autos que tienen placas falsas también carezcan de registro e incluso de seguro adecuado. Ojalá el auto no haya sido robado y que tu amigo tenga el título de propiedad, pero aún no lo haya registrado ni obtenido las placas nuevas. Si el auto no está registrado, puede que no esté vinculado de inmediato con tu amigo. Si hay algún problema, lo más probable es que recaiga sobre él. Si la policía te interroga sobre el auto, puede ser mejor no decir nada y hablar con un abogado si eso ocurre.
Una “infracción” como no tener la placa delantera puede resultar en una multa. Pero conducir sin placas o con placas falsas, también conocidas como “ficticias”, puede tener consecuencias más graves e incluso llevar al arresto.
En Nueva York se requieren dos placas. Puedes recibir una multa de hasta $200 más recargos si te falta la placa delantera (que normalmente se usa para leer los peajes). Conducir con placas falsas o alteradas es una ofensa grave y puedes ser arrestado, acusado de un delito menor o incluso de un delito grave, y el vehículo puede ser confiscado.